Su versatilidad y polivalencia le permiten actuar en las posiciones de alero y de ala-pívot
Diego Ibarlucea es la primera renovación y el primer jugador confirmado del C.D. Becedo para la próxima temporada, donde el club apuesta firmemente por retornar a la Liga EBA.
Nació en enero el año 2000 y ha comenzado la práctica del baloncesto en Cantbasket, donde jugaría en las categorías de benjamín y alevín de primer año. Acto seguido, desde el segundo año de alevín, se enroló en las filas de Pas Piélagos, donde permanecería hasta la categoría de cadete. En el año 2015, retorna a Santander para regresar a Cantbasket y jugar en el equipo junior.
En el 2016 pasó a formar parte de las categorías inferiores del C.D. Estela, estando a caballo con el primer equipo bajo las órdenes de Rafa Pueyo, llegando a debutar en Liga EBA en la temporada 2017/18. En la 2018/19, debutó en LEB Plata con David Mangas, categoría en la que ha jugado 20 encuentros. Además, Diego Ibarlucea ha sido el primer jugador cántabro del Siglo XXI en debutar en competición profesional. En el curso 2019/20, hasta que la pandemia del COVID-19 obligó a dar por finalizada la temporada, militó en el C.B. Solares y la pasada campaña, regresó por tercera vez a Cantbasket para disputar la Liga EBA con el conjunto de la capital cántabra, en donde ha promediado 6,1 puntos y 3,3 rebotes en los 19 partidos que ha disputado.
En su etapa formativa ha representado a Cantabria en los Campeonatos de España de Selecciones Autonómicas en Minibasket, Infantil y Cadete. Y en 2015, con Pas Piélagos, disputó el Campeonato Junior de España de clubes.
La pasada temporada, con el C.D. Becedo, disputó un total de 25 partidos anotando 7,1 puntos y capturando 4 rebotes, siendo un jugador importante en muchos momentos de la temporada.
Es un jugador polivalente, que puede desenvolverse en el rol de “3” y de “4”, con buenos porcentajes de tiro desde la media distancia y posee una buena lectura y colocación para ganar la batalla del rebote. En defensa, tiene una gran capacidad para emparejarse contra jugadores más pequeños en cambios defensivos.