Un parcial de 8-30 en los segundos diez minutos allanó el camino a favor de los de Víctor Gallegos
Al C.D. Becedo le tocaba afrontar el primer desplazamiento del curso visitando la capital del Besaya para medirse al Alega Torrelavega, una plantilla muy renovada respecto a la pasada temporada. Con resultados dispares en la primera jornada se vieron las caras en la apertura del mes de octubre y en un partido con muchas dosis de irregularidad por ambas partes, el cuadro santanderino se llevó el triunfo. El segundo cuarto y gran parte del tercero, donde brilló el acierto exterior, fueron los mejores momentos del C.D. Becedo, que le sirvieron para encarrilar el partido sin dar pie a un final igualado.
No obstante, el comienzo fue discreto. Un 5-0 de salida de Alega Torrelavega y ataques erráticos de los azules, propinaron un arranque con dominio torrelaveguense. Como respuesta, el C.D. Becedo endosó a su rival un 2-7 para igualar la contienda. Los dos equipos trataban de defender en zona, aunque en contadas ocasiones cambiaban el tipo de defensa para buscar sorprender. En otro orden de cosas, el choque se endurecía con numerosas faltas, especialmente del lado local, aunque no se pudo aprovechar transformando los tiros libres, un arma que tanto en pretemporada como en el inicio liguero habían sido un factor a destacar con buenos porcentajes.
Tras un irregular primer cuarto, el resultado era de 18-15 para Alega Torrelavega. A partir de ese instante, el dominio del partido pasó de manera indiscutible del lado del C.D. Becedo. Un 0-16 en cuatro minutos le daba la vuelta al marcador, un parcial que acabó culminado con cinco puntos consecutivos de Alfonso García Navalón, con un 2+1 final y, previamente, el equipo se colocó por primera vez por delante fruto de un triple lateral de Pablo Ríos después de una gran jugada colectiva.
Errores del rival y la buena defensa de los santanderinos, propinaban que la ventaja aumentara. Diego Scott contaría con protagonismo y aprovechó al máximo sus minutos. Jugó un total de 12, anotando 15 puntos con una carta de tiro inmaculada con un 100% de acierto donde resalta un 3/3 en triples. Suya también fue la última canasta del segundo cuarto, finalizando un contraataque que nació de un pase de ‘quaterback’ de jugador de NFL de Carlos Iradier.
A los vestuarios marcharon ambos conjuntos con un marcador de 26-45. Después de los 10 minutos de receso, el tercer cuarto arrancó de manera muy similar al desenlace de la primera parte, con un triple de Diego Scott desde un ángulo de 45º, situación que repetiría más adelante desde la esquina derecha, cerrando una muy buena actuación cuyo final se precipitó al cometer cinco faltas personales y, por ende, quedar eliminado.
La distancia seguía incrementando, llegando a rondar incluso la treintena. Las muñecas de los tiradores estaban calientes y certeras y prácticamente todos los exteriores consiguieron anotar al menos un triple. En dicho tercer período, se sumaron al festival Alfonso García Navalón, Héctor Ocejo y Pablo Ríos. El base-escolta del C.D. Becedo concluiría el cuarto con dos muy buenas acciones individuales.
48-75 era el marcador que reflejaba el luminoso con un cuarto aún por disputarse. Dada la amplia ventaja, el equipo concedió varias canastas sencillas y recibió 31 puntos en el cuarto final. Pese a la relajación final, los jugadores de Víctor Gallegos dejaron acciones de bella factura y jugadas corales, casi siempre con el mismo patrón, con Juan Arnaiz finalizando bajo el aro, siendo la mayoría de las veces con resultado exitoso.
Al término del partido, el electrónico reflejó un 79-93 que le sirve al C.D. Becedo para sumar la segunda victoria y arrancar con buen pie en lo que a triunfos se refiere. El próximo compromiso del equipo santanderino será en el Pabellón Uco Lastra de Cueto, donde recibirá a Cantbasket A el sábado 7 de octubre a las 18:30 en la tercera jornada de la liga regular de la Primera Autonómica Masculina.
Parciales: 18-15, 8-30, 22-30, 31-18
Árbitros: López Velo y Calderaro del Pozo.
Incidencias: Partido disputado en el Pabellón María Pardo de Torrelavega. Más de un centenar de espectadores poblaron las gradas, donde predominó un buen ambiente de baloncesto.